La real academia española define la palabra imposible como algo que no tiene facultad ni medios para llegar a ser o suceder, y define como improbable como algo inverosímil que no se funda en una razón prudente. Que la vida de Goliat era improbable pero sucedió. El amor, las relaciones, los sentimientos no se fundan en una razón prudente. Por eso no me gusta hablar de amores imposibles, sino de amores improbables. Por que lo improbable es por definición probable. Por que lo improbable es por definición probable. Lo que es casi seguro que no pase, es que puede pasar. Y mientas allá una posibilidad entre mil millones de que pase, vale la pena intentarlo.
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